RECORDANDO

"Si me ves por alguno de tus pensamientos,

abrázame que te extraño."

(Julio Cortazar)

Recuerdo hace varios años, cuando estaba en la U, me indignada cuando alguien de la familia y los amigos me decía "siempre nos acordamos de vos" mi respuesta, a mi gusto lógica en ese momento, era siempre "¿y qué les cuesta llamar, escribir, o lo que sea?"
Por un lado, puede que ese "nos acordamos" sea solo una gentileza como tantas otras que dicta la norma; por otro lado puede que sí se acuerden pero no vean necesario hacérselo saber al "recordado".

Sea cual fuere el motivo, una acción, un gesto, una frase, un pensamiento puede activar infinidad de acciones, gestos, frases, o pensamientos que, bien canalizados, pueden hacernos mejores personas o por lo menos hacernos sentir mejor con nosotros mismos.

Es así que, desde ese tiempo, tomé una decisión y es así que, salvo muy raras excepciones, cuando me acuerdo de alguien busco la forma de que lo sepa. Sin ninguna intención de que me responda, sin pretender que me diga algo parecido de vuelta; simple y llanamente para que sepas que en algún lugar de este planeta, en un determinado momento, alguien te recordó y quiso que lo sepas.